Agresiones sexistas, sexuales…

Si hablábamos ayer del caso de la niña violada por su padrastro durante dos años, y que está embaraza por esas violaciones continuas, con 11 años, hoy ahondaremos más en el tema de las agresiones sexistas y sexuales.

Ha aparecido en la prensa, que la policía ha liberado a una mujer discapacitada mental, de un prostíbulo en Girona,- el más grande de Europa, por cierto-, su madre la explotaba desde que tenía 18 años, ahora tiene 22 años. Al ser mayor de edad, no ser española y no tener reconocida la discapacidad, ha sido el blanco fácil de su madre, quién la ha obligado a prostituirse.

Cada vez está más claro, que #NoALaTrata. Si conocemos algún caso de explotación sexual, debemos acudir a la policía. Están especializadxs en estos temas y gracias a una denuncia de una asociación, han podido liberar a la mujer.

¿Han escuchado algo sobre agresiones sexuales en San Fermín? Pues bien, Antena3 ha destapado tres denuncias de mujeres, por haber sufrido agresiones sexuales y violaciones durante de la fiesta. Ya vemos que a los medios de comunicación les gusta más comentar lo limpios que han sido los encierros y obvian dar estos datos.

Siguiendo con San Fermín, también las reporteras tienen que aguantar agresiones. Una reportera de TVE, tuvo que soportar que la rociaran de vino y le dieran un beso en la boca. Aquí no queda todo, su compañero, desde el estudio, soltó el siguiente comentario  “Maribel, no provoques a ese chico, por favor”. Seguro que Maribel estaba feliz de que la hubieran besado sin su permiso… ya es lo que nos faltaba. Más info en Maribel y la extraña familia pamplonica.

Normalmente, cuando se habla de violaciones, se incide en la víctima: iba sola o acompañada, de noche o de día, llevaba ropa provocativa o no, conocía o no al agresor… Partiendo de todos esto, se intentan concienciar a las mujeres sobre no ir solas por la calle, no acercarse a desconocidos, ir siempre por lugares habitados y con gente… También gritar fuego cuando sufres un ataque… Así lo han descrito en el blog mujeres de El País: ¿Por qué «¡Fuego!, ¡fuego!» y no un clásico «¡Socorro, me atacan!»? Porque aparentemente cuando la gente oye gritos de «¡fuego!» es más proclive a implicarse y ayudarte que si oye un desgarrador «¡Me atacan!», que desata el miedo y el temor a ser también atacado.

Estamos de acuerdo, en que hay que prevenir a las mujeres para posibles agresiones. Pero también es importante recalcar- lo hacen también en el diario-, que la víctima nunca es culpable, NUNCA!. El culpable es el agresor y es hacia ellos, hacia donde debería dirigirse las campañas, hacia los acosadores y delincuentes, y tratarlos como tal. Yo soy libre de salir a la calle, vestirme como quiera e ir sola o acompañada, nadie tiene derecho a ponerme una mano encima, NADIE.

#ToleranciaCero